ESPN.-El histórico jardinero y posterior dirigente de Grandes Ligas, Felipe Rojas Alou, llega a su aniversario número 85 siendo uno de los casos más interesantes frente a la posibilidad de entrar al Salón de la Fama de Cooperstown, gracias a su desempeño como jugador, al igual que como capataz de los Expos de Montreal y los Gigantes de San Francisco. Como jugador, Rojas Alou participó en 2,082 encuentros, la enorme mayoría como jardinero, aunque vio tiempo en la primera base. Acumuló 7,908 apariciones al plato, de las cuales 7,339 son contabilizadas como turnos oficiales, en los que conectó 2,101 hits, 206 de ellos cuadrangulares. En una carrera de jugador activo que se extendió por diecisiete temporadas, desde 1958 a 1974, acumuló 852 carreras remolcadas y 985 anotadas, todo esto mientras compiló un promedio de bateo de por vida de .286, un porcentaje de embasarse (OBP) de .328 y un slugging (SLG) de .433, lo que le otorgó un OPS (OBP + SLG) de .761. Dichas estadísticas ofensivas acompañan a tres presentaciones en el Juego de Estrellas y quedar en tres oportunidades dentro de los mejores quince en la votación por el premio de Jugador Más Valioso de la Liga Nacional. Fue líder en hits de la Liga Nacional en dos temporadas, así como una vez en bases totales, tres veces dentro del top 10 en promedio de bateo, líder en turnos al bate durante dos temporadas, así como número uno en apariciones al plato en una oportunidad. Cabe destacar que Felipe Rojas Alou fue el primer dominicano que se estableció como jugador titular en las Grandes Ligas, así como también fue el primer pelotero de posición, por la República Dominicana, en ser seleccionado al Juego de Estrellas (1962). En 1976, el nativo de Bajos de Haina se convirtió en el coach de bateo de los Expos de Montreal y en 1992 se convierte en su manager, puesto que ocuparía por diez temporadas, antes de salir del equipo en el año 2001 y regresar como dirigente, pero con los Gigantes de San Francisco, desde el 2003 hasta el 2006. Rojas Alou ganaría el premio de Dirigente del Año en 1994, durante la temporada que se vio recortada debido a la huelga de beisbolistas, justo cuando su equipo tenía el mejor récord de las Grandes Ligas (74-40) y quedaría dentro de los primer tres puestos para recibir el premio en dos ocasiones más. Culminó su carrera como dirigente luego de 2055 partidos y terminaría con récord de 1033 victorias y 1021 derrotas, convirtiéndose en apenas el cuarto dirigente en la historia de Grandes Ligas con al menos 200 cuadrangulares como jugador y 1000 victorias como manager, siendo esta otra de las razones por la cual muchos consideran al dominicano como el capataz latino de mejor desempeño en la historia de MLB. Felipe Rojas Alou fue elegible por primera vez para la votación del Salón de la Fama de Cooperstown en 1980, obteniendo el 0.8 por ciento de los votos por parte de los periodistas, lo que automáticamente eliminó la posibilidad de ingresar de nuevo a la boleta como jugador. Sin embargo, tuvo una carrera exitosa como dirigente, la cual le ha permitido obtener una distinción importante y de alta consideración para ingresar al Salón de la Fama mediante el Comité de Veteranos, por lo que la posibilidad de ver al dominicano convertirse en un inmortal del béisbol, continúa viva durante la celebración de su octogésimo quinto cumpleaños.
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